La filtración y división eléctrica y/o mineral del agua se denomina ionización del agua. Mediante la ionización, se produce tanto agua alcalina (agua básica) como agua ácida.
Las moléculas de agua pueden dividirse en iones H+ (ácidos) y iones OH- (básicos). Esta reacción también se denomina ionización del agua.
En la práctica, significa que: El agua ácida se desvía o se recoge y puede utilizarse, por ejemplo, para regar plantas y flores cortadas, mientras que el agua alcalina se utiliza para el consumo humano y animal. El agua alcalina se bebe, entre otras cosas, para mantener el equilibrio ácido/básico saludable y restablecer el equilibrio de líquidos.
Además, el agua también se filtra de prácticamente toda la contaminación, incluidos los biocontaminantes, y es agua potable sana, de muy buen sabor, optimizada y vitalizada. A diferencia de la mayor parte del agua potable del grifo y del agua embotellada (¡¡no cumple la normativa sobre agua potable!!).
El agua del grifo pretratada, como el agua de ósmosis inversa y el agua destilada, también está libre de casi cualquier forma de contaminación, pero tiene la desventaja de que el agua siempre es ácida (valor de pH de 5 a 5,5) y todos los llamados "buenos" (los minerales) también han desaparecido del agua.